La Voz de San Bernardo; promoviendo nuestras voces, conversó con el escritor y editor René Silva Catalán para conocer un poco más sobre su proyecto editorial “Letra Clara”.
La verdad exactamente no sé cuando nace Editorial Letra Clara, solo tengo claro que en octubre de 2019, por la inestabilidad política volví de Bolivia, allá fui parte de la organización del Primer Festival Internacional de Poesía Jauría de Palabra en Santa Cruz de la Sierra, también hacía clases y talleres literarios en una universidad y centro cultural. Acá me encontré de lleno con el estallido social, sin trabajo, quise darle fuerza a esta idea de editorial que años antes, era un trabajo de media jornada. Me esperaban varios escritores que deseaban trabajar conmigo sus libros y en un periodo de 4 meses eran 5 autores, o sea, 5 libros publicados con el sello de Letra Clara en pleno encierro y entendí era mi emprendimiento que soñé, justamente en lo que me gusta que es el mejor pago para la literatura, a través de mi profesión como publicista y diseñador gráfico, con diplomado en edición y publicaciones. Hoy en menos de dos años, tenemos 15 libros publicados, el equipo de la editorial está conformado por una editora Gabriela Barrientos y otro diseñador Guillermo Díaz, prestamos servicios integrales desde la edición literaria hasta la producción en imprenta, trámites administrativos como el ISBN y Registro de Propiedad Intelectual, nuestro trabajo ha sido profesional, cuenta con un reconocimiento y prestigio que incluso nos permite hoy realizar proyectos para otras editoriales e imprentas, como para instituciones públicas y privadas. Otro asunto que nos hace distinto a otras editoriales, es que nos preocupamos de la difusión de nuestros editados en medios literarios especializados tanto impreso como digitales, nos damos el tiempo de buscar a otros escritores que reseñen y prologuen los libros de nuestro catálogo, de la distribución en librerías nacionales dependiendo del grado de confianza y comunicación con cada autor, donde es destacable mencionar que el 85% de los publicados son sanbernardinos.
Nuestra línea editorial es un 90% enfocada a la poesía y narrativa, hoy trabajamos también libros de arte como fotografía e ilustración, algunos ensayos literarios e históricos locales. Nos gusta trabajar principalmente a escritores que publican por primera vez, porque somos una buena alternativa en la orientación integral desde la edición literaria hasta que el libro sale de imprenta. Esto nos permite la confianza del autor a seguir con nosotros. Nos interesa permanecer en el formato impreso más allá de las nuevas tecnologías digitales y de los sucesos que hace más de un año y medio rigen el mundo por lo mismo disminuido el mundo editorial. Manejamos nuevos tamaños de impresión que ya es una alternativa distinta desde el diseño y formato como línea editorial, dependiendo del estilo de escritura, que de alguna forma destaca a la editorial, que si bien es cierto lo interesante es publicar libros bien escritos, digan algo al lector final, nos interesa en difundir no a la editorial, sino a los autores que han publicado con nuestro sello. Por lo mismo hacemos un trabajo personalizado y cercano con cada autor, que a veces puede demorar un tiempo, pero con la intención de lograr un buen producto desde lo literario como libro impreso final.
Para toda editorial y autor, la instancia de participar en una lectura, presentación, festival, congreso o feria, es la mejor forma de mostrar el catálogo de nuestras publicaciones, promocionar el trabajo, generar redes, ver qué sucede en el medio, para el lector que conozcan y lean a nuevos autores y sus libros, para los escritores conocer a sus colegas de oficio, los lean y reseñen, para tener una opinión general de su proceso de escritura, que les permita seguir con esa labor, que los inviten a participar en lecturas y encuentros, en fin, todo eso genera estas actividades que antes era normal, pero todo se congeló por estallido social, luego la pandemia y el encierro. Ahora recién se reactiva lentamente todo pero el mundo editorial latinoamericano se vio más afectado que en Europa, debido a las necesidades de cada país, zona y poder adquisitivo que depende mucho de la situación social, política y cultural de cada lugar. Con la pandemia lamentablemente obligó a cerrar algunas librerías, no hubo eventos que hizo bajar el acceso a la lectura y por ende a las ventas, quebraron las distribuidoras independientes bajo el monopolio de empresas gigantes como mercadolibre.com, responsable directo que además desaparecieran algunas editoriales con proyectos interesantes. Por un lado hubo que realizar nuevas estrategias como el uso de redes sociales, ventas en líneas, el uso de bases de datos e incluso la entrega mano a mano, lo cual ha dado resultados, con el comienzo del delivery literario que por lo menos para nuestra editorial ha sido positivo. Por otro lado, algunos escritores que recibieron el 10% de sus ahorros de AFP, aprovecharon para invertir en sus publicaciones, algunas de ellas con años por asuntos económicos, no realizaban que de una triste realidad social de nuestro país, ha sido un pilar para mantener firme y en pie a Editorial Letra Clara.
Un anhelo que tenemos es consolidarnos como una editorial independiente que trascienda San Bernardo, descubrir y publicar a jóvenes escritores, desarrollar su escritura y talento a través de talleres que ya realizamos como un plus anexo a la editorial, personalizar aún más nuestros servicios donde prime primero lo literario y luego obviamente lo comercial, descubrir que cada nuevo proyecto editorial es educación como profesionales del rubro, convertir a cada uno de los autores nuestros como nuestros mejores relacionadores públicos, alcanzar una distribución de nacional y latinoamericana, asunto que de a poco como hormigas ya realizamos en países como Perú, Argentina y Bolivia donde ya se encuentran algunos títulos publicados y muy pronto de la misma forma lo haremos en México.
Este último tiempo estoy tan abocado a Editorial Letra Clara y a mi otro proyecto editorial llamado Andesgraund Ediciones, a mi trabajo para otras tres editoriales, que mi lectura personal y proyectos escriturales personales están a medio camino, pero pronto por Andesgraund Ediciones, va salir una re edición mejorada de mi libro “Situación de calle”, que el año 2016 había sido publicado en Bolivia, también tengo listo “Pie de Trinchera”, hay tres editoriales que lo quieren publicar pero con seguridad lo haré con la editorial Los Perros Románticos, este libro debería de salir a fines de 2021, pero no he podido hacer la edición final, por lo que señalo y en camino trabajo otros dos libros, uno sin título hasta el momento y otro llamado “ Botón de Pánico”. Pero disfruto mi trabajo como editor, me toca leer mucho autor nuevo como a otros ya consagrados nacionales y latinoamericanos, que de alguna forma premian ese tiempo que no le puedo dedicar a mi trabajo escritural.
San Bernardo a nivel artístico se debe unificar, partir de cero y recuperar a esas generaciones que a nivel institucional se han sentido relegadas, discriminadas y dejadas de lado, sea los ciudadanos como los jóvenes artistas, a nivel institucional romper con ese arte y cultura populista y de salón de los últimos 13 años, la casa de la cultura y la corporación deben abrir las puertas no solo a esa elite de la cual ya se hizo monótono porque falta creación, dignificar al artista barrial y a sus gestores culturales porque en ellos hay talento, experiencia y un reconocimiento que acá no se ha visualizado, invitarlos a ser parte de las decisiones culturales de la ciudad (porque eso es San Bernardo, una ciudad no una comuna). Por otro lado en San Bernardo, la historia nos enseña y recuerda que somos un lugar con gran tradición literaria, varios hitos de esa historia sucedieron acá, personajes que han escrito vuelvo a decir esa tradición literaria chilena que ha traspasado las fronteras del país, como por ejemplo Eusebio Lillo, Juan Emar, Eduardo Anguita entre otros, pero hoy no existe eso, volver a sentirnos parte de ese legado, revivirlo y recordar que la educación, el arte y la cultura son un derecho universal de todas las personas. En San Bernardo no hay un punto de reunión, no hay una librería especializada, no hay reuniones o un lugar donde confluyan a la sabia discusión, saber lo que hace el otro, conocer a otras editoriales sanbernardinas, por lo menos hay 5 y debe haber otras que deben salir a la luz. El año pasado desde la biblioteca se trató de crear una cooperativa con todas ellas con un local ubicado al interior del pueblo de artesano al interior del Parque García de la Huerta, más que un lugar comercial, iba a servir para difundir el trabajo de cada una de ella y sus autores, pero todo quedó en el camino por la mala gestión de quien estaba a cargo del área cultura municipal en el momento. Los centros literarios o colectivos no se conocen y esa tarea es un desafío para las nuevas autoridades comunales, por eso mismo darle un valor importante a la biblioteca municipal es parte de unificar a los agentes ligados a la literatura local desde el desarrollo de distintas actividades desde ese importante recinto público, realizar congresos, seminarios, ferias, recordar las efemérides y después de todo lo que señalo y otros puntos más que puedo olvidar porque son muchos, podríamos decir que en San Bernardo pueda existir un mundo literario o movida literaria.
Me la imagino una ciudad con el doble de habitantes, con esos aires de pueblo que hoy va perdiendo, más áreas verdes para mitigar el cambio climático y la contaminación, ciclovías en todas su calles, transporte público eléctrico nuevas construcciones con techos verdes basadas en la línea arquitectónica del San Bernardo con sus primeras villas ferroviarias (obreras) del país, inclusiva con cada barrio con su biblioteca que funcione como centro cultural cívico – cultural, todas las plazas con su glorieta, pero para esto y otras cosas, se debe cambiar la mentalidad, una de ellas es el individualismo en que nos hemos transformado debido a los medios digitales, sobretodo en tiempos de encierro el celular acrecentó esta otra pandemia del ser humano. Por lo mismo debe comenzar nuevamente un trabajo de base en cada barrio de los agentes sociales como políticos, iglesia, la educación pública y privada como la cultura y el arte. Así imagino un San Bernardo que a pesar del crecimiento, más humano, más social, inclusivo y una herramienta son los libros y la lectura.
Nos pueden buscar en instagram como letraclara.editorial, en Facebook como LetraClaraEditorial y a través del correo editorialletraclara@gmail.com
Publicista y diseñador gráfico. Fundador de Descentralización Poética, editor y director de arte en Ediciones Andesgraund y Letra Clara. El año 2008, recibe el Primer Lugar Género Poesía en el 18° Concurso Municipal de Literatura de la ciudad de San Bernardo con el libro “Anatemas. Ha participado en importantes festivales de Latinoamérica como editor y poeta, en antologías nacionales y extranjeras. Ha publicado los libros “Anatemas” (Chile, Perú y Bolivia), “Situación de Calle” (Chile y Bolivia), pronto “Pie de Trinchera”. El año 2019, residió en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), donde fue uno de los organizadores del Primer Festival Internacional de Poesía Joven Jauría de Palabras, ciudad donde realizó en la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno y Centro de la Cultura Plurinacional, talleres de escritura creativa y edición tomando como temas de estudio la poesía chilena.